El camino emprendido en los últimos años de educación infantil y primaria tiene su continuidad en esta nueva etapa. La larga y específica formación del profesorado ha hecho que la educación atendiendo a las competencias básicas y al perfil de salida del alumnado sea una realidad.

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EKI ha sido un proyecto pionero en educar y evaluar por competencias y su diseño nos permite que el alumnado de el salto de los contenidos a la práctica a través de los proyectos que propone. La tan importante movilización de los conocimientos y el transferirlos a la realidad, es algo a lo que le damos máxima prioridad en ikastola.

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Queremos ayudar a nuestras y nuestros ikasles... personas competentes, que sepan manejarse ante cualquier problema que les surja cuando salgan de ikastola.

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Pero no podemos olvidar que esta época es especialmente difícil a la vez que interesante desde el punto de vista emocional. El ser un centro pequeño y al mismo tiempo cubrir las tres etapas de la educación obligatoria, nos permite conocer de cerca a nuestras y nuestros ikasles. Esta cercanía nos ayuda a detectar cambios emocionales que puedan ser significativos en su proceso educativo y en secundaria este aspecto es más relevante si cabe.

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Por eso trabajamos para atender a nuestro alumnado, creando un ambiente de confianza para conseguir que se sientan seguras y seguros y refuercen su autoestima y puedan desarrollar todo su potencial.

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